La conservación de alimentos es un método de probada eficacia para preservar el sabor y los nutrientes durante meses.
El calor elevado y los tarros herméticos mantienen alejados los gérmenes. Esto prolonga la vida útil de frutas, verduras, carne & otros alimentos.
Disfrute de las hortalizas de la huerta en cualquier momento, conserve las compras a granel, haga acopio de provisiones: Cocinar los alimentos no solo alarga la vida útil de los ingredientes. Las conservas caseras están llenas de sabores y nutrientes y son perfectas para hacer acopio de ellas. Usted mantiene el control de los ingredientes, evita el desperdicio de alimentos y tiene una comida rápida lista en cualquier momento.
Conservar es fácil: Se vierten los ingredientes en tarros herméticamente cerrados, se calientan y se dejan enfriar. Esto crea un vacío. Los gérmenes no tienen ninguna posibilidad de penetrar. El efecto: Los alimentos en conserva se conservan alrededor de un año.
Desde manzanas hasta bayas o judías, desde verduras recién cosechadas hasta filetes: Son innumerables los alimentos aptos para la conserva.
La leche y los productos lácteos pueden ponerse rancios al enlatarse, mientras que los alimentos ricos en almidón corren el riesgo de fermentar y estropearse más rápidamente. Si desea conservar carne, siga exactamente las instrucciones de conservación o la receta. De este modo se minimiza el riesgo de botulismo. Esta enfermedad potencialmente mortal puede estar causada por alimentos enlatados de forma inadecuada. Por norma general, Cuanto menor sea el valor del pH y mayor sea el contenido de azúcar, mayor será la vida útil del alimento. En el caso de las conservas delicadas, como el gulasch, a menudo son necesarios dos procesos de cocción para descartar un riesgo para la salud.
Consejo: Algunos de estos alimentos, como las patatas y la calabaza, pueden conservarse mediante congelación.
El enlatado es un método de conservación de alimentos de probada eficacia, también porque los utensilios necesarios están disponibles en muchas cocinas.
Necesitará:
Importante: El borde del vaso debe estar completamente intacto. Puede entrar aire a través de astillas o grietas y el contenido se estropea antes de tiempo.
Otras características prácticas incluyen embudos de llenado para un llenado sin goteo de los tarros y elevadores de cristal para una extracción segura de la olla o el horno.
Con la BORA X BO puedes cocinar, hornear y cocer al vapor en tres niveles, y hervir también es fácil.
¿Quiere conservar los alimentos y maximizar su vida útil? He aquí las instrucciones:
Si se almacenan correctamente, los alimentos en conserva se conservan alrededor de un año o más. Guarde los tarros en un lugar seco, oscuro y fresco, como un sótano.
La temperatura y el tiempo de ebullición correctos también influyen en la vida útil. Dependen de la dureza de los alimentos. Por regla general, cocine los alimentos entre 80 y 100 grados durante 30 a 120 minutos . Las zanahorias o la carne requieren temperaturas más altas y tiempos de cocción más largos que las bayas o los tomates. Consejo: Etiquete los tarros con la fecha y el contenido.
Importante: Al abrir, asegúrese de que se mantiene el vacío. Debería oírse un chasquido en el tarro de rosca y un silbido en el tarro de conserva.
Las sopas, salsas o guisos cocidos también se pueden reducir siguiendo el mismo principio que los ingredientes frescos.
Al cocer, se introducen los ingredientes en tarros y se conservan mediante calor. Al envasar, se introducen ingredientes ya cocidos en tarros. Para crear el vacío, se dejan enfriar los tarros con la tapa hacia abajo.
Cocine únicamente ingredientes frescos o platos recién cocinados. Asegúrese de que los tarros estén intactos y limpios, y no olvide esterilizarlos antes de llenarlos con los ingredientes.
Los alimentos también se pueden cocer en el horno, en la olla a presión o en la vaporera. El horno a vapor BORA X BO ofrece un programa especial para cocer alimentos.
Para conservar los alimentos y prolongar su vida útil, introduzca los ingredientes en un frasco esterilizado y caliéntelo al baño María. Al enfriarse, se forma un vacío, lo que sella herméticamente el frasco.