¿Todo fresco?
Las frutas y verduras, el pescado y la carne, los alimentos secos como la pasta y el arroz... cada alimento tiene sus propias necesidades en términos de almacenamiento. Si mantiene la temperatura óptima de almacenamiento y guarda los productos en el lugar ideal, podrá disfrutar de una frescura duradera, pero eso no es todo. El almacenamiento adecuado de los alimentos en el frigorífico y en la despensa también evita los desperdicios, protege el medioambiente y su economía. ¿Qué hay que tener en cuenta, qué alimentos no se guardan en el frigorífico y cuáles deben refrigerarse obligatoriamente? Le revelaremos consejos útiles para almacenar los alimentos.
La compra de la semana ya está hecha y ahora hay que guardar las provisiones. Muchos alimentos tienen requisitos especiales en cuanto a temperatura o las condiciones de iluminación. Algunos deben guardarse inmediatamente en el frigorífico para no romper la cadena de frío, mientras que otros deben mantenerse a una temperatura cálida. Estos son los conceptos básicos de almacenamiento seguro de alimentos:
La fecha de caducidad le indica hasta cuándo puede consumir los alimentos. Esta información es obligatoria para los alimentos perecederos, como la carne fresca. Es importante respetarla porque, de lo contrario, se corre un riesgo para la salud. En cambio, con la fecha de consumo preferente, el fabricante garantiza características específicas del producto, como el sabor, el aroma y la consistencia. No significa que el alimento no pueda consumirse después de esa fecha Muchos productos todavía pueden consumirse sin ningún inconveniente después de la fecha prevista. Aquí tiene que confiar en sus propios sentidos y hacer la prueba del olor y el sabor.
Y, por último, pero no por ello menos importante, la temperatura desempeña un papel fundamental a la hora de optimizar la conservación de los alimentos. Los frigoríficos clásicos con refrigeración estática tienen diferentes zonas de temperatura. La parte inferior tiene una temperatura más baja que la parte superior y los compartimentos de las puertas. Las versiones modernas suelen estar equipadas con una tecnología de refrigeración ventilada, también conocida como refrigeración dinámica. En este caso, un ventilador distribuye el aire de manera uniforme por todo el interior. A excepción de la zona de la puerta y los compartimentos de verduras, ya no se aprecian diferencias de temperatura significativas. Consejo: Más información sobre guardar los alimentos en la nevera.
Sin embargo, los frigoríficos con refrigeración ventilada también ofrecen distintos intervalos de temperatura. Según el modelo, hay zonas de cero grados, por ejemplo, y a menudo se puede regular individualmente la temperatura deseada en todo el interior.
Surge la pregunta de cuál es la temperatura óptima para conservar los alimentos en el frigorífico. Los expertos recomiendan una temperatura interior de unos 5-8 °C para los aparatos con refrigeración dinámica. En el frigorífico con refrigeración estática, puede utilizar las diferentes zonas para optimizar la conservación de los alimentos:
Contar con una despensa llena es muy práctico: Siempre tendrá alimentos para preparar platos caseros deliciosos. Para mantener sus reservas frescas hasta el momento de consumirlas, tenemos algo para usted: Gracias a estos consejos, almacenar alimentos será todo un éxito.
Frescos y secos: estas condiciones son ideales para la mayoría de los alimentos. Las excepciones son la fruta y la verdura, que se mantienen crujientes en condiciones de mayor humedad. La carne y el pescado deben refrigerarse siempre.
Los alimentos pueden almacenarse tanto en el congelador y el frigorífico como en el armario de cocina o la despensa. Los productos frescos se conservan mejor refrigerados y el congelador es ideal para un almacenamiento más prolongado. Todos los alimentos que necesitan un ambiente seco, fresco y oscuro se conservan mejor en el armario o la despensa.
Por lo general, basta con echar un vistazo al envase para saber a qué temperatura debe almacenarse el producto. «Mantener refrigerado» indica que debe almacenarse en el frigorífico a 0-8 °C; «Mantener en un lugar fresco» indica un lugar fuera del frigorífico a una temperatura máxima de 18 °C.
Los alimentos perecederos, como la carne y el pescado frescos, se conservan mejor en la parte inferior del frigorífico. Allí las temperaturas son especialmente bajas.
Las zonas más frías del frigorífico son el compartimento de las verduras y el nivel situado encima de este.
Lo ideal es almacenar los embutidos y el queso en la parte inferior del frigorífico.
El compartimento de las verduras presenta una mayor humedad y es especialmente fresco. Esto mantiene los productos frescos, como la lechuga, crujientes durante más tiempo.