Pequeñas exquisiteces servidas a lo grande: el arte de servir en cuchara

Pequeñas exquisiteces servidas a lo grande: el arte de servir en cuchara

Lleve la excelencia culinaria a su hogar y descubra todo lo que debe tener en cuenta para servir pequeños amuse-gueule en cuchara y abrir su menú con la perfección de un chef.  

A las cucharas … Listos … ¡Ya! – La composición perfecta en una cuchara

Para servir un canapé de cierto nivel culinario, a veces sólo es necesario recurrir a una pequeña y elegante cuchara de porcelana. Estas cucharas ofrecen espacio suficiente para dejar una impresión duradera en, tanto en cuanto al sabor como en cuanto a apariencia.  

Al igual que en cualquier plato, en una cuchara, el sabor también ocupa el primer plano.  Por ello, una cuchara perfectamente diseñada debe presentar una mezcla equilibrada de todos los sabores: dulce, ácido, salado, amargo y umami. Cada sabor necesita de su contrario. Tampoco puede faltar cierto toque de picante. 

Y lo mismo ocurre con las texturas: todo sabroso bocado en cuchara que se precie debe incluir algo cremoso, algo crocante y algo crujiente. Y, por qué no, algún encurtido, algo fermentado, algo ahumado o, incluso, flambeado. El sabor de cada ingrediente debe, además, combinar con el resto. Y lo más importante: las proporciones deberán ser las adecuadas para que un componente no enmascare a todos los demás. Lo mejor para dar con la proporción correcta de cada elemento es probar y experimentar. 

Comemos  con los ojos – Igualmente válido para exquisiteces servidas en cuchara 

Para presentar los diferentes elementos en cucharas se requiere aún más sensibilidad que para servir en platos. Durante la puesta en escena, trabajar empleando unas pinzas, en lugar de los dedos, nos dará mejores resultados. Otros elementos útiles a la hora de crear una composición atractiva son la manga pastelera y un pequeño pulverizador con los que dosificar jugos, aliños o salsas. Por supuesto, nuestra obra de arte gastronómica también puede crecer en altura.  

¡Sea creativo! Pruebe a transformar una fina lámina de calabacín en un rollito decorativo, o una chip de pan en una especie de vela. No obstante, no se olvide de asegurarse de que la creación en cuchara pueda degustarse de un bocado: aunque también comamos con los ojos, nuestra obra de arte no debería resultar demasiado grande para el paladar. 

Elegante presentación de un amuse-gueule en cuchara 

Unos hors d'oeuvre, un pequeño entrante o, incluso, como parte de un buffet más grande: las cucharas nos permiten presentar gran variedad de platos con mucho estilo. El requisito principal, por supuesto, es que la cantidad de invitados no exceda el número de cucharas. En cualquier caso, lo inusual del servicio en cucharas ya promete a nuestros invitados una experiencia culinaria muy especial y una explosión de sabores.  

La gastronomía en cucharas también es una opción ideal para celebrar una velada diferente con amigos. Transforme el acto de cocinar en el evento protagonista. Reúnase con sus invitados y preparen juntos los ingredientes para las cucharas, prueben diferentes composiciones, experimenten con las proporciones más adecuadas y terminen degustando el bocado, o, mejor dicho, los bocados perfectos.   

Los mejores consejos y trucos para servir en cucharas 

A la hora de servir un plato en miniatura en una cuchara, las reglas tradicionales del emplatado cambian ligeramente: las proporciones de cada uno de los componentes deben elegirse de forma que combinen entre sí para que todos los sabores presentes en el bocado armonicen perfectamente.  

Un truco profesional para conseguirlo: aunque la cuchara parezca pequeña, disponga los componentes de forma que todos los elementos queden a la vista. Sólo así funcionará adecuadamente la interacción entre ojo y boca, paladeándose todo el sabor durante la degustación.  

Otro truco: condimente con alegría. Al fin y al cabo, buscamos una explosión en el paladar que nos haga recordar la experiencia. 

La cuchara para servir BORA Piccolo y la tabla para servir BORA Wendelstein 

Inspiradas en el hogar bávaro y austriaco de BORA, las cucharas para servir BORA Piccolo y la tabla para servir BORA Wendelstein llevan la excelencia culinaria directamente a su hogar. Comience su menú con un delicioso amuse-gueule, servido magistralmente en las refinadas cucharas de porcelana. El diseño de la tabla BORA Wendelstein a juego es un tributo a la montaña bávara de 1838 m de altura, cuyo contorno puede apreciarse en la misma tabla. 

 

Desde un rösti mini con salmón ahumado hasta el brownie de chocolate sobre ragú de naranja: descubra la cocina en cuchara de la mano de nuestras recetas. Hemos preparado una selección de platos en miniatura a la altura de cualquier amateur que disponga de una cocina.