Que se haga la luz: iluminación en la cocina

Que se haga la luz: iluminación en la cocina

Tanto luz natural de fuera como fuentes de iluminación artificial en la habitación: el proyecto de iluminación de la cocina requiere ideas creativas y una buena planificación. Conozca los aspectos importantes para la iluminación de la cocina y cree un concepto de luz con el que la cocina se convertirá en un rincón de bienestar.

Aspectos básicos del proyecto de iluminación de la cocina

En el proyecto de una cocina no debe olvidarse nunca la iluminación. Las fuentes de luz tienen una gran importancia a nivel funcional, emocional y estético: desde la luz básica (con, p. ej., puntos de luz de intensidad regulable en el techo) hasta la luz de realce.

La luz funcional en la cocina es muy importante porque la zona de trabajo para manejar cuchillos y otros utensilios afilados debería estar bien iluminada; p. ej., con luces led de bajo consumo debajo de los armarios o en el sistema de barandilla entre la encimera y los armarios altos. También son muy prácticas las barras de luz adhesivas.

En la zona de comedor integrada, la iluminación de la cocina tiene un componente emocional: aquí una buena luz ambiental matizada es más importante que la de realce. Para colocar sobre la mesa del comedor quedará muy bien una lámpara decorativa de techo que proporcione una luz agradable en esta zona pero que no deslumbre a las personas que estén sentadas.

Consejo: Las lámparas para mesa de comedor no deben colgar a más de 70 centímetros ni a menos de 55 centímetros sobre la superficie de la mesa.

Luz en la cocina: ¿blanca cálida o blanca fría?

El proyecto de iluminación de la cocina no es solo para elegir el lugar donde instalar las fuentes de luz, sino también la temperatura del color adecuada. La regla básica dice que una luz blanca cálida de 2700 a 3000 kelvin tiene un efecto relajante, mientras que las luces blancas entre neutras y frías (3300 hasta 5300 kelvin) se parecen más a la luz natural y, por tanto, son más apropiadas como iluminación funcional.

El diseño lumínico de la cocina debe incluir tanto lámparas de luz blanca cálida, como luz blanca fría. Las primeras están recomendadas para crear un ambiente acogedor en determinados espacios, por ejemplo, el de la cena común, y las segundas, para desayunar, cuando la luz diurna no es suficiente. Para ver mejor y favorecer la concentración al picar, lavar y cocinar también es una buena opción la luz blanca entre neutra y fría. Las luces de la cocina deben estar colocadas de forma que enfoquen la encimera, el fregadero y la placa de cocción.

Buena iluminación hasta en el frigorífico

En cualquier caso, merece la pena elaborar un plano para, sobre él, adecuar el diseño lumínico a las distintas zonas. En función del tamaño de la habitación, la sección y los elementos de la cocina, se deberán tener en cuenta los siguientes puntos:

  • Iluminación de la zona de comedor
  • Luz en el módulo de pared
  • Luz natural por la ventana
  • Luz en la isla de cocina
  • Iluminación de los electrodomésticos de cocina

El proyecto de iluminación debe guiarse por la cocina y por cómo desea equiparla y usarla. Debe hacerse las siguientes preguntas para el proyecto de iluminación de su cocina:

  • ¿Cuánta luz natural recibe en la cocina por las ventanas?
  • ¿La isla de cocina es más bien una zona de trabajo o una zona de comedor?
  • ¿Cuántos armarios hay integrados en el módulo de pared?
  • ¿Hay aparatos que también sirven de fuente de luz?
  • ¿Qué longitud y profundidad tiene la encimera?

Las soluciones inteligentes tienen mucho que aportar en los proyectos de iluminación de las cocinas modernas. ¿Qué tal unas tiras de luz que se conecten, por ejemplo, al abrir los cajones? Aún más inteligentes son las luces con temporizador que ajustan automáticamente la temperatura del color a las horas del día.

Consejo: La luz del frigorífico debe iluminar bien todos los estantes para que pueda encontrar rápidamente lo que busca. Cuanto mejor iluminado esté, más fácilmente verá todo y más energía se ahorrará al usar el frigorífico. En la mayoría de los casos, merece la pena sustituir las bombillas antiguas por ledes, que duran más.