Arquitectura con mayúsculas: la espectacular nueva sede de BORA en Herford

BORA es sinónimo de soluciones innovadoras para la cocina que cuestionan aquello a lo que estamos acostumbrados. Todos los electrodomésticos prémium de la empresa alemana de Raubling se caracterizan por una tecnología innovadora con un diseño exigente. Los edificios de la empresa también reflejan esta filosofía: apartándose de las naves industriales normalizadas o de los edificios de oficinas estándar, nace una arquitectura futurista en nombre de BORA con un fuerte poder expresivo. Por ejemplo, la nueva sede de Herford, centro de la industria alemana de las cocinas en Westfalia. En esta construcción de acero y cristal que parece flotar por su impactante inclinación, se presentará el mundo de la marca a los visitantes, la experiencia de los productos y «el principio BORA» de diversas maneras a partir de mediados de septiembre. El proyecto lo realizó el estudio austriaco LORENZATELIERS, que ya había diseñado la arquitectura icónica BORA en otras de sus sedes.

El nuevo edificio de BORA a la entrada de Herford es visible desde lejos. Como un ala de cien metros de largo y 13,5 metros de alto en acero y cristal, el nuevo edificio parece flotar sobre el suelo apoyado en unos esbeltos soportes elevados de acero. La sobrecogedora impresión de dinamismo de esta arquitectura se ve especialmente bajo la fachada sur, voladiza e inclinada 42 grados, orientada hacia la carretera nacional que pasa por delante.

Adelantado a su tiempo y con una forma nunca vista en el mundo: así es como el fundador de la empresa, Willi Bruckbauer, quería que fuera el nuevo edificio en Herford. Decidió no convocar un concurso para la obra arquitectónica y se lo pidió directamente a Peter Lorenz, con quien ya había realizado interesantes proyectos de construcción en el pasado: «Sorpréndame con una propuesta desconocida hasta ahora en el mundo». El arquitecto, que dirige LORENZATELIERS en Viena, Innsbruck y Trieste, y a quien Bruckbauer ya encomendó los proyectos para la sede de BORA en Niederndorf (Austria) y para el edificio de oficinas de BORA en Raubling (Alemania), aceptó el reto. «Nada me motiva más que la oportunidad de realizar soluciones inusuales en lugar de la arquitectura convencional y contar con la confianza de un cliente valiente», afirma Peter Lorenz.

De las diez propuestas presentadas en total para el nuevo edificio de Herford, la favorita al final fue la construcción en forma de ala, una forma que permite su visibilidad desde el acceso a la ciudad desde la carretera nacional B 239. Este mensaje arquitectónico expresa perfectamente la esencia de la marca BORA: valentía empresarial y alta exigencia de innovación, que permiten diseñar productos excepcionales para experiencias excepcionales en torno a la cocina.

Arquitectura como experiencia: la notable forma y la vivacidad de la cubierta exterior del edificio consolidan a BORA en la nueva sede

La construcción, que cumple las más altas exigencias técnicas, se sustenta en una estructura portante de acero de diez metros de altura, en forma de rombo con esquinas redondeadas, que parece flotar sobre el suelo a una altura de aproximadamente tres metros. El cuerpo del edificio, de prácticamente cien metros de largo, está cubierto por una fachada construida en piezas de acero con perforaciones de distinto tamaño y elementos de cristal, en parte de colores, que dan al edificio su aspecto rítmico y moderno de alta tecnología. Las vistas al exterior y las impresiones del interior son posibles y deseadas: la transparencia parcial de la fachada refleja la voluntad de integrar el edificio con su entorno y de permitir un diálogo entre pasantes e integrantes. El principio básico del proyecto de Lorenz, crear una arquitectura clara en la que pueda verse la estructura portante de acero, responde exactamente a la filosofía de BORA. Especialmente en el interior, las enormes vigas de acero del Tirol del Sur se dejan deliberadamente a la vista, sin disfraces.

Las deformaciones de la estructura portante ante diferentes estados de carga fueron analizadas al detalle por el equipo ingeniero de Werkraum Ingenieure, y procesadas en consonancia por las empresas ejecutoras de la obra. La deformación máxima de 130 mm en el borde del rombo se pudo compensar gracias a un peralte de la forma del taller. Una cooperación ejemplar permitió la coordinación de las tolerancias de los trabajos principales: hormigón, acero y fachada.

El grado de detalle requerido por el desplazamiento horizontal en el área de las fachadas supuso un reto para las partes interesadas. El tejado, literalmente descapotable, se convierte, así, en otro elemento destacado único: las dos partes del tejado corredizo, de 63 metros cuadrados cada una, ofrecen una experiencia espacial única en la zona entre las dos primeras cuadernas principales, directamente sobre la zona del bar y restaurante, y prácticamente sin interferencias acústicas pese a los miles de vehículos que circulan por la zona. Aquí, el espacio interior puede convertirse, si se quiere, en un luminoso espacio exterior. «No hay en Alemania un tejado corredizo más grande que este», afirma el arquitecto Peter Lorenz. «Su realización fue todo un reto debido al tamaño y el equilibrio estático, y la razón por la que esta construcción ha sido tan exigente para nosotros los arquitectos y proyectistas». Así, por ejemplo, sólo se encontró una empresa dispuesta a enfrentarse a lo desconocido para la fabricación del tejado descapotable tal y como estaba planificado en el proyecto.

El concepto de espacio abierto con amplios ventanales reclinados, así como los materiales para el interior cuidadosamente optimizados —para los que Willi Bruckbauer tiene buen ojo como ebanista de formación que es— ponen el marco adecuado a una experiencia completa de los productos y la marca. El nuevo edificio de la sede de Herford estará abierto al público como exposición permanente a partir de mediados de septiembre de 2023. Los nuevos productos BORA pueden presentarse en eventos de Live Cooking. Las dos plantas y los alrededor de 2.000 metros cuadrados del nuevo edificio de la tienda insignia BORA alojan una cocina para demostraciones, además de superficies de exposición para socios y un restaurante.

Vocación de sostenibilidad: el nuevo edificio está equipado con tecnología inteligente y rodeado de verde

El espacio para 80 vehículos protegido de la intemperie ubicado bajo el ala permite maximizar la superficie abierta y dar forma, en consecuencia, a una zona verde que responde a los deseos de los vecinos.. Al igual que en las otras sedes de BORA, aquí también hay disponibles varios puntos de recarga eléctrica. Para Willi Bruckbauer es importante reducir al máximo la huella ecológica de su nuevo edificio. «Nuestra nueva sede nace del trabajo de, en su mayor parte, empresas y talleres de la zona de Herford y el este de Westfalia».

El concepto energético se ha realizado a medida del uso específico del edificio. Gracias al uso de energías renovables mediante geotermia (intercambiador de calor y perforaciones a gran profundidad), así como al aprovechamiento máximo de la superficie del tejado para módulos fotovoltaicos, excepto la zona del tejado descapotable, el edificio cumple la norma de eficiencia energética KfW 55. Esta instalación fotovoltaica de 100 kWp suministra energía al edificio. La energía térmica demandada se genera mediante bombas de calor en combinación con veinte sensores de profundidad de 130 m. La mayor parte del año es posible recurrir al enfriamiento gratuito. Para cubrir los picos de demanda se recurre, tanto en verano como en invierno, al agua del tanque para rociadores, de 200 metros cúbicos y situado en el mismo terreno, como almacenamiento térmico.

Todo el edificio se puede tanto ventilar como purgar mecánicamente y con recuperación del calor. El flujo de aire de entrada se conduce hacia el espacio a través de entradas de aire integradas junto al suelo. El cambio de aire se reduce automáticamente al mínimo gracias a los sensores de CO₂. En los períodos de transición, el área de exposición se puede ventilar a través de la misma fachada. Los paneles climáticos de los techos, de respuesta rápida y diseñados de una sola pieza, permiten la calefacción y refrigeración del interior. Además, la combinación de los sistemas de transferencia de energía garantiza un alto nivel de confort térmico junto a la máxima eficiencia energética.
En función del uso, el edificio de BORA Herford será un EEC, o «Edificio energía neta cero».

Perfil del edificio BORA Herford

Largo:                                               95m

Alto:                                                 13,5m

Superficie proyecto de obra:           aprox. 2.000m²

Superficie del terreno:                     aprox. 10.000m²

Tipo de construcción:                      estructura de acero con elementos de hormigón pretensado

Fachada exterior:                             chapa galvanizada perforada

Inicio de las obras:                          marzo 2022

Inauguración:                                   septiembre de 2023