Un quiebre elegante con el estereotipo de la casa de campo

Perfil de la cocina: 

Socio de BORA y arquitecto: ERBEE Keukens, www.erbeekeukens.nl, Instagram: erbee_keukens 
Lugar: Weert, Países Bajos 
Forma de cocina: cocina con isla en L, armario para electrodomésticos y minibarra 
Productos BORA: BORA Pure 
Materiales: encimera de cerámica, frentes de la cocina en negro grafito 
Fotografía: ERBEE Keukens 

El nacimiento de una nueva sensación en el hogar 

Las vigas torcidas, las paredes inclinadas y los techos bajos confieren a las antiguas fincas su carácter inconfundible. Sin embargo, para los arquitectos y los interioristas, estas encantadoras desviaciones de la norma suponen un verdadero desafío porque reducen al absurdo cualquier solución estándar. Por el contrario, estos edificios antiguos requieren creatividad y sensibilidad a la hora de planificar.  

Pero si los profesionales de la planificación se involucran en la situación y tratan con cuidado y prudencia la estructura del edificio, pueden crear grandes cosas. Eso es lo que ocurrió en esta finca situada en la ciudad neerlandesa de Weert, en la cual, tras una completa reforma, surgió una nueva sensación de amplitud y luminosidad. 

De las paredes interiores solo se conservaron las vigas de madera que servían de soporte. De este modo, ahora se puede disfrutar de una amplia vista de toda la sala de estar, el comedor y la cocina e incluso del jardín a través de los amplios ventanales. La cocina minimalista y elegante contrasta con el resto del interior más bien rústico. Su diseño sobrio la convierte en un verdadero punto de atracción.

La perfección se refleja en los detalles 

Los planificadores de cocinas de ERBEE Keukens han logrado integrar la moderna arquitectura de la cocina de manera armoniosa, casi simbiótica, en la finca con todos sus rincones y recovecos. Esto se aprecia principalmente en la viga de roble, que parece crecer como un árbol de la encimera de cerámica clara. 

Pero los planificadores no se limitaron a incluir la viga en su diseño. Todos los muebles de la cocina se integran a la perfección en el ambiente porque su forma y su tamaño se adaptan a la estancia. Por ejemplo, la isla de cocina extragrande tiene una pequeña extensión, un truco que aprovecha a la perfección la superficie disponible. 

El fregadero se encuentra en el lateral más corto en forma de L directamente frente al ventanal, mientras que la placa de cocción BORA Pure con extractor integrado está situada en la gran isla. Esta disposición permite a los invitados sentarse cómodamente en los taburetes de la isla y mantener conversaciones relajadas con el cocinero o la cocinera. Gracias al eficaz extractor BORA, los vapores de la cocina no serán una molestia. 

Combinación de blanco y negro como ruptura de estilo intencional 

Para combinar con los frentes de la cocina de color negro grafito, los profesionales de cocina neerlandeses escogieron una encimera de cerámica que imita la piedra natural blanca. El fregadero negro con la grifería negra a juego y la placa de cocción BORA Pure aportan detalles oscuros a la encimera clara. En conjunto, se obtiene una combinación consecuente y muy elegante de colores claros y oscuros que contrasta con la calidez de la casa de campo que la rodea. 

Esta ruptura de estilo provocada por la cocina minimalista y moderna aporta un toque especial al entorno y transforma la finca en un lujoso chalé. Las llamativas lámparas colgantes de luz cálida que cuelgan de cables negros sobre la isla de cocina y la barra estrecha crean una conexión visual entre los dos estilos. 

El suelo de color gris uniforme que se extiende por toda la estancia también ejerce un efecto armonioso. Su diseño sobrio prepara, de cierto modo, el escenario para la impactante puesta en escena de la cocina de ensueño. El objetivo de los planificadores de crear una combinación estética entre lo histórico y lo moderno ha sido un éxito.