Pero hasta ahora, ni siquiera los amantes confesos de los colores oscuros se atrevían a decorar totalmente en negro su vivienda. Las notas oscuras sí que se aceptaban, pero según muchos interioristas expertos, poner en negro los frontales completos de los muebles o incluso toda la cocina produce un efecto agobiante, abrumador, demasiado sombrío. «¡Tonterías!» O eso al menos piensa Marco Singer, que con el equipo de su estudio Schreinerei Singer de la ciudad alemana de Espira ya ha hecho algunas cocinas en negro que atrapan todas las miradas. «Que el negro hace más pequeño el espacio es un cuento. Una estancia en negro puede quedar fantástica y no tener un efecto agobiante en absoluto si el espacio en sí y el plan que subyace son buenos», afirma el ebanista. Así lo ve también la interiorista Sarah Henner, que con el equipo proyectista de Grüner GmbH ha terminado igualmente algunas cocinas y decoraciones de interior totalmente en negro. No obstante, puesto que las superficies oscuras no reflejan tan bien la luz como las claras, «en una cocina negra debe prestarse especial atención a que entre mucha luz y que la iluminación sea buena.