Naturalidad gracias a las encimeras de madera genuina

Naturalidad gracias a las encimeras de madera genuina

Durante mucho tiempo, en las cocinas modernas se impusieron los tableros plastificados o las encimeras de hormigón. En la actualidad, la tendencia es retomar los materiales cálidos, como la madera, porque crean un ambiente muy especial. Deberías considerarlo a la hora de elegir una encimera de madera genuina para tu cocina. 

copyright: entertheloft (design studio) 

Por qué nos gusta la madera 

Las encimeras de madera genuina no solo se adaptan a la perfección en edificios antiguos rústicos, sino que también pueden revalorizar cocinas modernas en un abrir y cerrar de ojos. La madera tiene un efecto cálido y crea una agradable sensación de espacio. Si eliges una encimera de este tipo, estarás llevando una porción de la naturaleza a tu propia cocina. 

Solo un apunte: La madera no es completamente resistente a arañazos y cortes. Además, el material es sensible al calor. Esto significa que debes utilizar una superficie adecuada para trabajar o manipular. Puedes impregnar la madera con aceite y cera. Es costoso en comparación con las encimeras de acero inoxidable u hormigón, pero merece la pena. 

Se lo garantizamos: Una encimera de madera genuina es natural, sostenible, antiestática y transpirable. Con los cuidados adecuados, podrás disfrutar durante mucho tiempo de este material respetuoso con el medioambiente. La madera se adapta a todos los estilos de cocina y, gracias a sus diferentes colores y texturas, sigue siendo única. 

Maderas adecuadas para la cocina 

En los comercios hay encimeras de madera maciza muy bonitas, pero a veces muy caras, fabricadas en una sola pieza continua de madera. Una alternativa más económica son las encimeras de madera maciza que se ensamblan a partir de varias piezas individuales y obtienen así un aspecto único. 

Los tipos de maderas duras y de poros finos, como el haya, el arce, el fresno, el cerezo, el nogal y el roble, son especialmente adecuadas para fabricar encimeras de cocina. En cambio, no deben utilizarse maderas de árboles de fronda o de coníferas, como el abeto o el aliso, porque hasta la aventura más sencilla en la cocina dejará aquí su huella de inmediato. Para quienes buscan algo exótico, recomendamos una encimera de bambú o, en caso de contar con un presupuesto elevado, de caoba, iroko, teca, wengué y zebrano. 

Con un aceitado adecuado puedes aclarar u oscurecer la madera elegida. Las certificaciones ecológicas y los sellos medioambientales, como el Ángel Azul, el PEFC o el FSC garantizan que tu encimera proviene de existencias renovables o de una silvicultura sostenible y que ha sido procesada como corresponde. 

Mantenimiento adecuado de la madera, pero ¿cómo? 

Ya sea en una cocina de una casa de campo o en una vivienda situada en medio de la ciudad, las encimeras de madera genuina son naturales y auténticas. Sin embargo, para preservar el encanto único de tu encimera, es necesario realizar un mantenimiento periódico: 

  • En primer lugar, debes limpiar todo el polvo de la encimera antes de aplicar un aceite especial para madera (alrededor de una vez a la semana). 
  • Elimina los restos de suciedad solubles en agua lo antes posible con un paño húmedo y seca bien las zonas afectadas. 
  • Si una mancha no desaparece, puedes lijarla con un grano ligero y siempre en el sentido de la textura. 
  • También se recomienda el uso de superficies térmicas para ollas, tostadoras y otros utensilios con el fin de no dañar la madera de la encimera. 
  • Pero no debes utilizar detergentes u otros productos de limpieza abrasivos en encimeras de madera genuina. 
  • Si tienes un lavavajillas justo debajo de tu encimera de madera genuina, no lo abras hasta que se haya enfriado por completo para que la encimera no se hinche. 

En resumen: Existen muchas buenas razones para adquirir una encimera de madera genuina. Si tienes en cuenta estos consejos, seguramente disfrutarás de tu trocito de naturaleza durante mucho tiempo.