Temporada de espárragos al fin

Temporada de espárragos al fin

Los espárragos son deliciosos, pero pueden ponerse duros rápidamente o adquirir una textura fibrosa. Aquí le contamos qué tipos de espárrago existen, la forma ideal de prepararlos y cuáles son especialmente saludables. Duros no deberían estar nunca.

¿Qué tipos de espárrago existen?

La temporada de espárragos empieza en abril y termina el 24 de junio. El espárrago es una planta muy exigente, que deja de echar brotes si se cosecha con demasiada frecuencia. Por eso, para los amantes de los espárragos, el 24 de junio —fecha conocida en algunos sitios de Europa como la «Nochevieja del espárrago»— es una fecha importante. Naturalmente, puede variar dependiendo del tipo de espárrago, el clima y el país de origen.

Por ejemplo, en Francia es popular el espárrago morado, una variedad silvestre que crece muy bien en la región mediterránea, o en Tailandia existen variedades propias. En las cocinas alemanas, el preferido es el espárrago blanco. Crece bajo montículos de tierra o «caballones» y se cosecha a mano hincando una gubia especial que abre un pequeño hoyo.

El espárrago blanco tiene ese color porque no recibe luz solar antes de la cosecha. Si se asoma al exterior antes de cosecharlo, la punta adquiere un color violáceo. En cambio, el espárrago verde sí «toma el sol» porque crece sobre el suelo. Reacciona a la luz produciendo clorofila y, en consecuencia, su color cambia. La cosecha del espárrago verde es simple: solo hay que cortarlo. Su piel es más fina que la de su hermano blanco, más recia.

Cocinar, saborear y cultivar espárragos

El sabor fino y suave de los espárragos blancos (o con ligeros tonos violeta) combina perfectamente con las clásicas patatas y salsa holandesa. Pero también va muy bien en ensaladas o con un escalope (o escalope «veggie»). Pele los espárragos con cuidado desde arriba hacia abajo y parta o corte los extremos secos. El tiempo de cocción oscila entre doce y veinte minutos. Lo ideal es que no queden demasiado blandos, sino «al dente», igual que la pasta.

Los espárragos verdes se utilizan sobre todo en la cocina mediterránea y su sabor tira más a fruto seco. Al ser más delgados, solo necesitan unos ocho minutos de cocción, y también quedan mejor algo crujientes. No hace falta que pele los espárragos verdes tan minuciosamente como los blancos. Basta quitarles el tercio inferior de la piel. Los espárragos verdes van muy bien para saltear, por ejemplo, con aceite de colza en el wok o en el teppanyaki.

¿Tiene un huerto y le gustaría cultivar espárragos? Donde mejor crece la planta es en un lugar soleado con suelo arenoso. Sus largas raíces necesitan un hoyo de hasta 40 centímetros de profundidad. Se planta desde abril hasta final de mayo; después hay que esperar pacientemente porque la cosecha puede realizarse solo tres años más tarde.

Cualidades saludables del espárrago

Si desea alimentarse de forma sana, los espárragos son una buena elección. Ya sean blancos o verdes, ambos contienen vitaminas importantes como la A, la C, la E y la K, y también aportan al complejo B. Por otro lado son una valiosa fuente de minerales como el magnesio, hierro, potasio, calcio, cobre y fósforo.

Una sola ración de espárragos cubre su necesidad diaria de ácido fólico y vitamina C. Y cuanta más luz vea el espárrago antes de la cosecha, más saludable será. Esta característica hace muy atractivo al espárrago verde, que tiene un alto contenido de vitamina C.

Esta verdura rica en agua tiene muy pocas calorías: 100 gramos de espárragos suponen solo alrededor de 16 calorías. Así también mantenemos la conciencia satisfecha. No obstante, los espárragos no están recomendados si se tienen unos valores elevados de ácido úrico en sangre o piedras en el riñón. Pero por lo demás, ¡disfrute de la temporada de espárragos! En los mercados y puestos callejeros encontrará espárragos frescos, reconocibles por sus puntas aún cerradas y no muy parduzcas.