Aventura épica en bicicleta de montaña
Octubre 2021
La Cape Epic es para el ciclismo de montaña lo que el Tour de Francia para el ciclismo en ruta: el momento más importante del año y una experiencia que los participantes nunca olvidarán. Cuando dos ciclistas de nuestro equipo BORA – hansgrohe cambian su bicicleta de carreras por una de montaña con suspensión total, tenemos el guion perfecto para una aventura épica.
Durante 8 días, la Cape Epic atraviesa la provincia sudafricana del Cabo Occidental, pasando por paisajes impresionantes. La ruta varía cada año y seduce con sus fascinantes paisajes de montañas y valles, majestuosos cañones, encantadores viñedos y místicos bosques. Tiene dos particularidades: tanto ciclistas aficionados como profesionales compiten en la misma carrera y un equipo siempre está formado por dos personas que tienen que completar la carrera juntas. En total han de superarse unos 700 kilómetros y 16 000 metros de altitud en una fase previa más siete etapas. En lugar de alojarse en un hotel, los participantes duermen en el campamento que cada día va desplazándose de un lugar al siguiente. Los ciclistas pueden despreocuparse por completo de la logística, incluido el lavado diario de las bicicletas. La convivencia de los participantes en el campamento asegura que no solo los momentos sobre el sillín, sino también antes y después, transcurran en un ambiente inolvidable.
Créditos fotografía:
michal červený photography
Absa Cape Epic
BORA – hansgrohe goes Cape Epic
Los ciclistas del BORA – hansgrohe Lennard Kämna y Ben Zwiehoff pudieron disfrutar de la Cape Epic del 17 al 24 de octubre. En ningún momento se trató de logros deportivos, sino de vivir juntos una experiencia única con el maillot del equipo y presentar este desde una perspectiva diferente y nueva. Además de la profesionalidad y el meticuloso trabajo que hay detrás de un equipo ciclista profesional, también es importante saber mirar más allá. Al director del equipo, Ralph Denk, le vino la idea de participar en esta carrera, épica en todos los sentidos, tras haber mantenido diversos contactos y conversaciones. Los presagios individuales de Lennard y Ben no podían ser más diferentes. Lennard, procedente de las llanuras del norte de Alemania, se ha subido por primera vez a una bicicleta de montaña este año. Este ha sido, además, su regreso a la competición tras unos meses de descanso. En cambio, para Ben ha supuesto regresar a sus raíces deportivas y cumplir al mismo tiempo un sueño, ya que durante muchos años se sintió en su elemento por los senderos del mundo como ciclista de montaña profesional. Fácilmente transmitió su amplia experiencia con ruedas anchas a Lennard, que mejoró notablemente con la práctica diaria. En todo momento se notó que para ambos la máxima prioridad era divertirse y que el lema del equipo «Band of Brothers» no es solo un eslogan vacío.
Sensación de «grand tour» y algo más
Gracias al socio del equipo Specialized, los dos pudieron disfrutar de su propio camping dentro del campamento con una caravana y un equipo de apoyo. Tampoco les faltó su cocinero particular, ya que el gasto de calorías en la Cape Epic es comparable al de un grand tour. Por eso los dos se sintieron casi como en el BORA – hansgrohe Kitchen Truck. El único pequeño ajuste que tuvieron que hacer fue respecto a los desayunos, debido a una hora de salida de las etapas mucho más temprana. Lo que no podía faltar en una aventura como esta, sin la presión por lograr resultados, era una copa de vino local bajo el sol del atardecer sudafricano después del trabajo realizado.
Disfrutaron de paisajes nada comunes, que cambiaban en cuestión de un instante, y sobre todo de las experiencias y encuentros con la naturaleza sudafricana. Podían darse situaciones como que una ventana abierta permitiera a un gecko saltar a la cara de Lennard en mitad de la noche, o que de repente se cruzara por la carretera una familia de monos. También hubo algunos incidentes que cabían dentro de lo posible, como el fallo de la calefacción la primera noche en la caravana o los cambios bruscos de las condiciones meteorológicas.
Con todas las impresiones y todo lo vivido en Sudáfrica, los días pasaron muy rápido. Ahora queda una hermosa amistad forjada durante este intenso tiempo. El inigualable optimismo de Ben contagió de buenas vibraciones a Lennard —que se estrenaba con la bicicleta de montaña— y le motivó continuamente a llegar a sus límites y superarlos. A pesar de todo el esfuerzo físico, al llegar a la meta, Lennard y Ben estaban simplemente felices y agradecidos por esta impresionante experiencia. Ahora, por experiencia propia, ambos saben que la Cape Epic hace honor a su nombre.
Puedes ver más impresiones, fotos cautivadoras e interesantes audios originales en el diario en vídeo del viaje campo traviesa del dúo en la página de Instagram de BORA – hansgrohe: https://www.instagram.com/borahansgrohe/.
