Planta antigua, nuevo look
En esta cocina del sur de Inglaterra, nada, o casi nada, es como solía ser. Los propietarios han tratado de crear algo nuevo y único partiendo de la planta antigua y empleando materiales reciclados. Una sala de estar y comedor de planta abierta que irradia luz en colores claros y primaverales.
La cocina nueva: funcional y estética
¿Qué hacer con la cocina vieja al renovar la casa? Esa pregunta también se la plantearon los propietarios de esta pieza única al sur de Inglaterra. Se decidió que la cocina debía reemplazarse y adaptarse a las necesidades de los propietarios, manteniéndose, eso sí, su planta. Además, el diseño debía encajar con el resto de la arquitectura de esta casa victoriana.
Diseñar un espacio estéticamente agradable y, aún así, funcional no fue problema para el personal experto en diseño de cocinas de WoodWorks Brighton. Desde el diseño hasta la fabricación a medida de los muebles, en esta empresa de Sussex se encargan de todo. Y se nota: aquí nada se dejó al azar.
El nuevo diseño, con estanterías, estantes y armarios a media altura tanto abiertos como cerrados, permite a los propietarios resaltar aquello que les resulte más importante. Además, la superficie de apoyo integrada en el lineal ofrece superficie extra para preparar alimentos o emplatar. Las puertas, revestidas con palillería de madera, se cierran fácilmente para que sólo quede a la vista aquello que de verdad se desee mostrar.
Un homenaje al bosque y a sus habitantes de fábula
La combinación de colores elegida, un verde oscuro y un rosa empolvado, puede resultar algo inusual, aunque sólo a primera vista. Observando con detenimiento, resulta fácil ver lo bien que encajan colores y formas, y no sólo porque, por ejemplo, seamos capaces de reencontrar ese verde bosque en los objetos decorativos, cuidadosamente seleccionados, como una radio antigua o un pequeño cuenco de porcelana verde. Nos encontramos ante una cocina que cuenta una historia.
Pequeñas macetas, un conejo cuyas patas alzan deliciosos bocados y una lechera en forma de vaca: la selección casi mágica de todos esos pequeños «bits and pieces», o detalles, nos recuerda al país de las maravillas de Alicia, la protagonista del afamado cuento británico. Los azulejos de la pared posterior de la cocina, en un rosa empolvado y con forma de nido de abeja, subrayan la alegría que irradian los pequeños elementos decorativos.
¿Y qué más necesita un bosque? Muy fácil: mucha madera. Un elemento que también encontramos en esta cocina y, además, reciclado, y es que la sostenibilidad, en este caso, era un elemento primordial. Mientras que los armarios y puertas están realizados en contrachapado de abedul pintado a mano, la encimera se ha ejecutado en «foresso», una especie de terrazo de madera, fabricado a partir de residuos de madera reciclados y conglomerados con biorresina: una novedosa forma de aprovechamiento del material de desecho.
Sin renunciar a la tecnología más innovadora
El verde intenso de los frentes y el aspecto dinámico de la encimera marcan la sencillez del resto del conjunto, conseguida gracias a las discretas hendiduras de los armarios y a los electrodomésticos instalados: en la isla encontramos un BORA Pure que se integra a la perfección en el diseño general y que, además, permite disfrutar de una vista libre hacia el resto del espacio.
La instalación de una campana extractora convencional no sólo resultaría visualmente molesta, también los molestos olores se propagarían más rápido por esta sala de estar y comedor de planta abierta. La aspiración hacia abajo de vapores y olores era un punto imprescindible para propietarios y diseñadores, el práctico tamaño y la sobriedad del diseño de BORA Pure, un plus muy agradecido: permite mantener el aire fresco y, a la vez, conservar el encanto de esta cocina.
